Colección: GOLD AUTUMN










Estos trozos cerámicos, así, tal cual, jamás debieron existir.
Sus formas caprichosas, el suave tacto de sus bordes, son fruto de haber sido arrastrados al fondo del mar hasta que el tiempo y la acción del agua los han devuelto a la orilla.
Cada día un paseo por la playa es diferente. Lo ha sido este verano.
Me gusta descubrir los elementos naturales (madera, conchas...) con los que poder construir objetos diversos, o dejarlos para que se fundan nuevamente en la naturaleza.
También hay mucha basura, sobre todo plásticos, bricks, latas... que tratamos de recoger cada día para depositar en contenedores.
Y entre todo eso, trozos cerámicos y de cristal, muchos también van a parar a la basura (demasiado grandes, con aristas cortantes...).
Trozos que habrán formado parte de paredes que cobijaron muchas historias de familia, de amigos, de amor, de lágrimas, de ilusiones, de desencantos,...
Y ahora en mis manos, después de limpiarlos, dibujarlos a mano, un poco de barniz, el soporte adecuado...
los reinvento en piezas de joyería contemporánea para que puedan seguir contando historias y de paso, dejen un poco más limpio nuestro océano.

Colección: GOLD AUTUMN

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